lunes, 13 de junio de 2016

Hijos de chusqueros ventoseantes.

Uno se merece los lodos de sus polvos.

Los macrobios bípedos, no todos con braceo, son la muestra de las subpoblaciones hispánicas existentes. Es probable que exista, existan subpoblaciones humanas susceptibles de ser educables; las de ayer, no.

Es penoso su nivel de inteligencia.

En los mercados de ganado, de toda especie, era hábito la inspección de su dentadura; estas especies no tienen "palas" que garanticen tiempo de uso mínimo. Por mi parte, como campesino viejo, no hay robla, compañeros.


Ignoran, mienten e injurian.

Como ignorantes lo son por genética, por lo que al no detectar su minusvalía que les discapacita para la educación primaria, es un error del método de educación; como máximo podrían ser educados como aves canoras necrófagas.

Son hijos y nietos de la hambruna; hijos y nietos de chusqueros ventoseantes.


¡Adios!

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