Maquinaria agrícola: fabricantes de equipos agrícolas que participan en una "carrera de armamentos"

El tamaño y la potencia de la maquinaria agrícola están aumentando, al igual que el tamaño promedio de la granja. Un productivismo que acompaña a un preocupante sobreendeudamiento.
Por Nicolas Legendre  Publicado hoy a las 11:17, actualizado a las 11:38
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Un tractor del grupo alemán Fendt, en Villepinte (Seine-Saint-Denis), en febrero.
Un tractor del grupo alemán Fendt, en Villepinte (Seine-Saint-Denis), en febrero. Fendt
Su peso es de 14 toneladas, el equivalente a una docena de autos de tamaño mediano. Bajo su capó: un motor de casi 13.000 cm 3 queemite una potencia de 517 caballos. Comercializado por la marca alemana Fendt, este tractor es una de las "estrellas" de la edición 2019 del Salón Internacional de Maquinaria Agrícola (Sima), que se extiende hasta el jueves 28 de febrero en Villepinte (Seine-Saint-Denis). . Coste de la máquina: unos 350.000 euros, excluidas las opciones. A modo de comparación, los primeros tractores accesibles económicamente para el "promedio" campesino francés, cuyo uso se generalizó después de la Segunda Guerra Mundial, estaban equipados con motores que desarrollaban entre 15 y 40 caballos. Los campesinos en ese momento vendieron tres o cuatro animales de tiro para comprar una de estas máquinas.
Han pasado siete décadas, durante las cuales los fabricantes de equipos agrícolas han competido por innovaciones. Pulverizan, año tras año, sus propios registros en términos de potencia y tamaño de las herramientas. En beneficio de los campesinos, cuya comodidad laboral han mejorado, pero también, según ciertos actores de la profesión, en detrimento, ya que han contribuido a reducir el número de agricultores, su endeudamiento y su Dependencia de actores ajenos a las fincas.
Los "mastodontes" de tractores, entre 250 y 500 caballos, siguen siendo minoritarios en los hangares franceses. Pero sus números están aumentando constantemente. La potencia promedio de los tractores nuevos registrados en el país sigue una curva ascendente. Según el Axema, sindicato de fabricantes de equipos agrícolas, ha pasado de 109 a 141 caballos entre 2000 y 2017. El tractor, herramienta emblemática, constituye, además, la parte emergida de un vasto iceberg. La evolución de las gamas de sembradoras, remolques, prensas y herramientas de cosecha responde al mismo leitmotiv: cada vez más grande, más sofisticado, más caro.
"Muchos campesinos están comprando equipos de alta tecnología que no necesitan, y cinco años más tarde están saliendo del negocio"
Esta "carrera armamentista" ha acompañado los recientes cambios en la agricultura. Entre 1970 y 2013, según datos de Agreste del Ministerio, la superficie promedio de las granjas francesas se ha triplicado. Entre 1955 y 2018, la fuerza de trabajo agrícola se dividió por seis. En este contexto, caracterizado por el predominio del modelo productivista, el uso de herramientas más "poderosas" se presentó como inevitable. Objetivo: hacer más trabajo en menos tiempo, con menos mano de obra y más comodidad.