domingo, 27 de enero de 2019

La España Unida a la España Desgajada

España la perdió un Rodrigo. Otro Rodrigo reconquistará España.

Un Liber Judiciorum de la España Unida lo salvó una Asturias. Otra Asturias se lo dará a saber a esta España Desgarrada, poco a poco,nunca fuego a fuego, siempre letra a letra.

La España desgajada desde el 14 de agosto de 1385 por la desmemoria de su origen en hombres de río. No Hispania sino Iberia. 

No es Hispania  la tierra a reconquitar sino Iberia a reconquistar.

No fueron los mahometanos venidos del Tigris y el Eufrates quienes conquistaron a los hombres iberos sino los venidos del Tiber y Po que les cambiaron sus pronombres para negarles su origen. Los lughones y orniacos no negaron sus orígenes, tomando el nombre del último río que les dio vida, el Arla, que, al norte, recordó sus fuentes del Naranco en la capital de su reino. Y, como su hijo, al río Douro  como demarcación imposible a ceder y si posible a defender.

Así, no es Granada sino Bragança la marca del pueblo ibero. Mi amada Bragança en el recuerdo de mi Ródano y Georgia.

Así es la memoria en el tiempo, la crónica de un Pueblo no olvidado que, con origen en el rift nororiental de África migró a través de los grandes ríos hasta el Atlántico y Cantábrico, rodeando y atravesando al mar entre tierras

Al llegar, que no establecerse, como fin de su migración, inventó el modo de hacer el no ser desmemoriado de los suyos, la escritura y, de no perder las técnicas para adaptarse a los valles que los recibían, inventó la aritmética, así cómo orientarse bajo el Azul, la geometría.

Estos días hemos saltado de alegría con la técnica de la minería aplicada al salvamento de las creaturas agarradas por la Tierra y la Atmósfera axfisiadoras, compactadoras, si ríos que les diesen vida.

Hace unos años, se fueron a la desmemoria técnicas de administraciones políticas e idiotas por un proceder no planificado de desgarrar una política centralizada en Madrid, como se había conseguido en Toledo en otro momento de la vida de los iberos, allá en el siglo VIII. 

Es momento de reconsiderar la política autonómica que, en ningún caso pasó a ser de "transferencia" de competencias, siendo de "asunción" de competencias, conllevando la "duplicidad" y, con ella, el "conflicto" entre administraciones.

Leer a Jaume Noguera (U de Barcelona): 

Los inicios de la conquista romana de Iberia: Los campamentos de campaña del curso inferior del río Ebro.

Hemos asumido la nomenclatura romana sobre el olvido de la ibera.



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