miércoles, 15 de agosto de 2018

Parole, parole, parole

Parole, parole, parole.

Al Estado de Italia se le exige la crónica del puente, la documentación ordenada en el tiempo de las diferentes etapas de su Concurso, Resolución, Asignación, Proyecto, Aprobación, Implantación, Actividad y Control.

El Ejecutivo dice que van a condenar, sin antes definir si hay delito y tipo.

El Estado externalizó el trabajo que debiera haber hecho. Porqué externalizó y si lo hizo no ha realizado el trabajo de controlar el cumplimiento de tal dejación de funciones.

No hay que olvidar que externalizar es transferir la actividad de políticos a idiotas.
Carece de sentido entender que el idiota tiene capacidad política. Quien considere que ello es posible contraviene la teoría evolutiva. 
Filogenéticamente el idiota no puede hacer el salto evolutivo al político.
El idiota no es educable como político, ni tampoco en sentido opuesto.
Decir que un gorila es educable como humano. De igual modo, aquel que nace idiota degenera como tal pero no regenera a político.

Cuando el idiota dice que la administración privada es más eficaz y eficiente que la pública, tiene la lógica aspiración a robar la identidad del envidiado político.

Recuerdo que se me injurió cuando en el Hospital General de Asturias se idiotizó la Limpieza, la Lavandería, la Asistencia médica.
Si, se idiotizó con las “peonadas” y con la actividad médica idiota compartida con la política.

El político puede asumir el trabajo idiota, aunque con una menor eficiencia ya que la cualificación política tiene unos costes muy superiores a los tenidos por los idiotas.

Nota.- Los griegos dividían en dos a los hombres: esclavos y libres. Y a los hombres libres: idiotas y políticos.




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