sábado, 15 de septiembre de 2018

Un poco de uva madura, monito


Von Neuman (en húngaro no en inglés. Lo subrayó en Princenton).

Entre 1944 y 1946 colaboró en la elaboración de un informe para el ejército sobre las posibilidades que ofrecía el desarrollo de las primeras computadoras electrónicas; de su contribución a dicho desarrollo destaca la concepción que sigue acerca de una *memoria* que actuase secuencialmente y no sólo registrara los datos numéricos de un problema, sino que además almacenara un programa con las instrucciones para la resolución del mismo, que no es más que saber y conocimiento del autor del trabajo científico, así como de aquellos colaboradores del autor, presencialmente o bibliográficamente. 

Debiérase tomar la tesis de este matemático y su obra acerca del robot autoalimentable, de fácil acceso vía internet.

Téngase en cuenta el propósito de la defensa de una tesis científica y el lugar que ocupa el colaborador del doctorando presencial directo e indirecto a través de la bibliografía citada.

Dado que se hizo uso de herramientas exploradoras de coincidencia de textos, el hacer uso de la matemática de conjuntos de von Neumann por parte de individuos reaccionarios, hay que recordar que a él se le acusó de reaccionario.

Por otro lado, la exigencia de clases presenciales, físicas y/o telemáticas, no escuché ni leí que el trabajo docente fuera colectivo. Dado que coincide este hecho con el destierro del genocida, recordaré que este ha sido quien arrasó el kraussismo, la Institución Libre de Enseñanza, y, con ello, el trabajo colaborativo, manifestación tenida en las, mal nombradas, tertulias en las que manifiestan su discapacidad intelectual para desarrollar un trabajo colaborativo. De hecho, consideran que el doctorando no tiene que tener colaboradores ni tampoco "director de orquesta" para extraer de cada instrumento el máximo provecho. No podremos tener otro ilustre "Clarin" ni reuniones en torno al té en casa de "Vitorín" como aquellas tan queridas en la plaza del Riego de Vetusta. ya nadie puede seguir los pasos de la Regenta.







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