domingo, 2 de diciembre de 2018

La 'Biblia' del Reino de Asturias

La 'Biblia' del Reino de Asturias


Tras los estudios, se ha concluido que este documento hace referencia a Taborneda, en el concejo de Illas. /Archivo catedral de León
Tras los estudios, se ha concluido que este documento hace referencia a Taborneda, en el concejo de Illas. /
ARCHIVO CATEDRAL DE LEÓN

Una publicación en la que participan investigadores de la Universidad de Oviedo analiza en sus páginas 27 documentos relativos a la monarquía astur. El más antiguo es uno del año 775 en el que aparece la firma de cuatro reyes asturianos

DIEGO MEDRANO
El trabajo se ha visto ahormado desde el silencio, de modo minucioso y modesto, inasequibles al silencio o desaliento durante varias décadas. Se han visitado archivos catedralicios, nacionales y municipales, universitarios y alejados de la mano de Dios. Cada documento estudiado ha generado una ficha tipo, su análisis natural, el análisis formal o paleográfico, la reproducción facsímil. La conmemoración de los 1.300 años del Reino de Asturias ha sido enriquecida por un equipo liderado por dos profesores de la Universidad de Oviedo que ha analizado todos los documentos originales producidos en el noroeste peninsular hasta el año 900 y cuya culminación es el volumen 114 de la colección 'Chartae Latinae Antiquiores' por la editorial Urs Graf Verlag de Zúrich. ¿El precio del libro? Cercano a los mil euros.
Cuatro son los profesores universitarios encargados de llevar a cabo la labor: Pilar Ostos-Salcedo y María Luisa Pardo Rodríguez (Universidad de Sevilla) y Miguel Calleja Puerta y María Josefa Sanz Fuentes (Universidad de Oviedo). Al conjunto se suman dos coordinadores internacionales: Guglielmo Cavallo y Giovanna Nicolai (Universidad de Roma La Sapienza). Todos los documentos aparecen enriquecidos por la edición paleográfica y la reproducción facsímil a escala 1:1 de los originales. La Biblia de la Diplomática y la Paleografía internacional, el sueño de investigadores de la talla de Marichal o Perrat durante el siglo pasado.


'Fakilo'. Es el original más antiguo que hace referencia a Asturias, del reinado de Alfonso II, en el año 803. Es una donación de bienes para crear Santa María de Libardón, en Colunga.
'Fakilo'. Es el original más antiguo que hace referencia a Asturias, del reinado de Alfonso II, en el año 803. Es una donación de bienes para crear Santa María de Libardón, en Colunga.

María Josefa Sanz Fuentes, Pepa Sanz, profesora emérita honoraria de la Universidad de Oviedo en el área de Ciencias y Técnicas Historiográficas, vinculadas al departamento de Historia, en la Facultad de Filosofía y Letras, capitana general de la presente industria, explica sin rodeos el logro mayúsculo de la presente compilación: «Hablamos de un conjunto documental de 32 piezas. De ellas, 27 corresponden a la monarquía asturiana. Las cinco primeras de época visigoda. 27 originales en dos siglos pueden parecer un número escaso, si tenemos en cuenta los existentes en otros países, pero no está nada mal. Lo importante es que son piezas de extraordinario interés para nuestra historia».
Hay documentos que son palimpsestos, una escritura inferior borrada con los medios de la época (leche, generalmente) y otra escritura superior. Pepa Sanz se ilumina como una bombilla al explicar uno de ellos: «Fue el hallazgo más espectacular. El documento que ahora podemos leer con toda claridad es del año 887. Para escribirlo se borró otro documento anterior, del que aún no hemos podido establecer la fecha. Lo que ocurre es que con el tiempo la escritura primera, la que había debajo, vuelve a salir. Se puede apreciar en el margen derecho y en la parte inferior. Gracias a los servicios técnicos de la Universidad de Oviedo hemos podido ver más de lo que se apreciaba a simple vista. Desde mis tempranas investigaciones en el archivo del monasterio de San Pelayo supe que era un palimpsesto», comenta.

Alfonso III el Magno. Es el más tardío, muy cuidado en la forma y hace referencia a León. Está firmado por el rey, sus tres hijos, obispos y otros magnates.
Alfonso III el Magno. Es el más tardío, muy cuidado en la forma y hace referencia a León. Está firmado por el rey, sus tres hijos, obispos y otros magnates. / 
A. C. D. L.

El más antiguo de todos «es un documento intitulado por el rey Silo, data del año 775 y hace referencia a una zona de la provincia de Lugo, cercana a Asturias, situada entre los ríos Eo y Asma. En él aparecen también las rúbricas autógrafas de Alfonso II el Casto, de Ordoño I y de Alfonso III.
Del rey Ordoño I, con suscripción también de Alfonso III, se conserva un documento por el que dona al obispo de León, entre otras cosas, la iglesia de Santa Eulalia de Ujo. Luego está el más famoso, el documento conocido como 'Fakilo', el original más antiguo que hace referencia a Asturias, firmado por Alfonso II en el año 803. Se trata de una donación de bienes a un monasterio sito en Libardón, concejo de Colunga, con bienes repartidos entre este concejo y el de Villaviciosa».
Pasamos páginas, frente a los ojos escrutadores y mágicos de Pepa Sanz, la belleza de la página encendida no puede ser mayor, cada documento va precedido por un estudio minucioso de la escritura en la que ha sido ejecutado, se proporcionan sus datos físicos, se informa de las ediciones que con anterioridad se han hecho del mismo. Los que están en malas condiciones (el de Mondoñedo) se reproducen igual y estudian de modo similar al resto, aun con renglones perdidos, gran variación en el módulo de la letra o las grandes manchas producto de la humedad. Calidad excelsa tanto en la edición como en las reproducciones fotográficas, hechas en las mismas medidas que el documento original. Pepa Sanz matiza el conjunto: «La colección completa ha conseguido reunir a lo largo de muchos años de trabajo los documentos italianos, franceses, alemanes e ingleses anteriores al año 900, por eso pasan ya de 100 volúmenes. Su editor, Urs Stocker, que mima la edición desde su imprenta en Zúrich (Suiza), se desplazó hasta Oviedo para ver in situ el trabajo que estábamos haciendo, y así pudo apreciar la calidad de la documentación».
Un multimillonario apasionado financia la empresa, no está nada mal, y sigue con lupa los descubrimientos, pero para Pepa Sanz la mayor satisfacción no es esa: «La felicidad ha sido poder reconocer dos nuevos documentos como asturianos, cosa que hasta ese momento se ignoraba. Ocurrió así con el que hace referencia al río Niao, en el concejo de Cabranes, conservado en el archivo de la Catedral de León. Y en ese mismo fondo pudimos reconocer otro referido a Taborneda, en el concejo de Illas», explica.

El de los cuatro reyes. Es el más antiguo de todos (775). Hace referencia a Galicia y está firmado por los reyes Silo, Alfonso II, Ordoño I y Alfonso III.
El de los cuatro reyes. Es el más antiguo de todos (775). Hace referencia a Galicia y está firmado por los reyes Silo, Alfonso II, Ordoño I y Alfonso III. / 
A. CATEDRAL DE LEÓN

Nos imaginamos una labor policial de muchos guantes, visitas silenciosas, comprobación de los documentos hallados en archivos perdidos en las nuevas tecnologías actuales, y Pepa Sanz no nos defrauda en las pesquisas: «Al documento se le interroga siempre, se lo digo mucho a mis alumnos. Pero, ojo, si se le aprietan los tornillos sin razón, miente. Se debe evitar la inercia de que el documento diga tal cosa cuando no lo dice. De llegar a él con ideas preconcebidas o similares a 'debe decir tal'. En la investigación, tan rigurosa como policial si quieres, él mismo te guiará por el camino adecuado: si es original o una copia, y si es una copia de dónde procede, por qué y para qué». Hay palabras de agradecimiento por la labor precedida de paleógrafos y diplomatistas, fundamentalmente los estudios de Antonio Floriano Cumbreño en los años 40 del pasado siglo, y Santos Larragueta en los 50. Estudios, de labor seria y honesta, que contaron con muchas menos facilidades que las actuales.
Pero, lo más importante, son los planes de futuro, desentrañados por Pepa Sanz: «Nosotros aquí, en Asturias, y nuestras compañeras Pilar Ostos y Maria Luisa Pardo, en Sevilla, seguimos en la brecha del trabajo de edición de documentos y, cómo no, de la realización de estudios sobre la historia de la escritura». Labor callada, esfuerzo mantenido, modestia infinita: qué lejos se llega desde el afán diario de todos los días.

No hay comentarios:

Publicar un comentario