Púlsares y ondas gravitacionales
La teoría de Einstein también predice la existencia de ondas que se propagan en el espacio-tiempo, como resultado del movimiento o colapso de objetos masivos.
La existencia de ondas gravitacionales fue confirmada hace unos 30 años gracias a los radio púlsares. Este descubrimiento fue galardonado con el Premio Nobel en 1993. Además de ello, en 2016 el interferómetro láser LIGO hizo la primera detección directa de ondas gravitacionales debido al movimiento de objetos de tamaño estelar. No obstante se espera encontrar ondas gravitacionales a una escala mucho mayor, cósmica.
Se cree que tanto el nacimiento del Universo en el Big Bang como la colisión de agujeros negros supermasivos en el centro de las galaxias más tarde pueden producir ondas gravitacionales que continúan propagándose hasta nuestro Universo cercano.
La precision de los púlsares, junto con la red de sincronización de púlsares (PTA, por las siglas del término ingles “Pulsar Timing Array”), en combinación con el telescopio SKA, proporcionarán una oportunidad única para encontrar estas escurridizas ondas gravitacionales a longitudes de onda que ningún otro instrumento existente o planificado hasta ahora será capaz de detectar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario