viernes, 4 de marzo de 2016

Corrupción, no. Robo, sí.

La corrupción es fuente de vida. Sin corrupción la vida no existe.
La corrupción identifica al Inframundo, al mundo creativo.
¿Porqué denominar corrupción al robo?
Por ignorancia, pero en el subconsciente del que roba late el corazón envidioso de la creatividad, o corrupción.
Recuerdo cuando respondí que el aire corrompido que exhalamos es la penúltima ola evolutiva, al ofertarlo como palabra. La última ola evolutiva es la palabra soportada por las interminables costas de nuestro mar oceano. Mandelbrodt las supo descifrar como Champolión lo había hecho antes y los físicos hace unos días descifraron el pergamino interminable gravitacional oculto en las cillasperladas del mar Muerto. Hoy podemos leer el último renglón del Universo que pasa a ser Mundo. Lleva por título galaxia GN-z11.

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