Equipado con una cámara térmica, un ingeniero muestra las diferencias de temperaturas en París durante la ola de calor.
Para revelar el impacto de las elecciones urbanísticas y los materiales de construcción sobre la temperatura, Thibault Laconde compartió su "ola de calor" en Twitter.
EN UN
Momento en que sus compañeros se escondían en las sombras para sobrevivir a las temperaturas récord en la capital (42,6 ° C), el ingeniero Thibault Laconde lanzó el jueves 25 de julio en una extraña expedición. Armado con su cámara de infrarrojos y un termómetro, el líder de Callendar, una compañía especializada en el estudio de los riesgos climáticos, visitó varios lugares emblemáticos de París.
El objetivo de sus ardientes peregrinaciones: hacer visibles las "islas de calor", este cóctel de opciones urbanas y arquitectónicas y densamente pobladas, que acumulan calor durante el día y frenan el enfriamiento de las ciudades por la noche, y explican las diferencias significativas en Temperatura entre zonas urbanas y rurales.
Metal ardiente
"De un edificio a otro, los valores pueden cambiar completamente",explica a Le Monde . Y para citar como ejemplo su declaración en la estación Saint-Lazare . En el lado izquierdo de la imagen térmica, vemos dos edificios contiguos a pleno sol. Uno de cada piedra cortada, construido en la primera mitad del XIX XX siglo, alcanzó una temperatura de aproximadamente 40 ° C, cerca de la del aire ambiente. El otro, todo vidrio oscuro y metal, construido a finales de los años 70, supera los 55 ° C.
La elección del color, claro para reverberar los rayos del sol, así como los materiales poco conductores en el edificio más antiguo parecen haber sido sensatos en la lucha contra las "islas de calor". Este término, acuñado en 1958 por el climatólogo Gordon Manley, describe un fenómeno observado 140 años antes por el farmacéutico y meteorólogo británico Luke Howard, en su estudio del clima de Londres y luego en medio de la revolución industrial.
Otra declaración de Thibault Laconde en París, otra observación sorprendente: en medio de un lugar sin sombra, la estatua del león de Belfort en cobre negro absorbe el calor y los cortes claramente en la imagen térmica con su base de piedra y los edificios de Haussmann. circundante.
"De ahora en adelante será necesario tener una reflexión real sobre los proyectos elegidos durante las competencias de planificación urbana", subraya el ingeniero. El proyecto debe seguir siendo viable en los próximos 20-30 años, dado el cambio climático. " Se trata de todos los episodios de altas temperaturas deben ser más regular e intenso. "Los veranos sin ola de calor se vuelven bastante raros, ya que desde 2010 solo el verano de 2014 no conoció ninguna ola de calor, detalló David Salas y Mélia, climatólogo, interrogado el jueves por Le Monde . En comparación, en 1947-1988 (42 años), solo hubo nueve olas de calor. "
"¡Gracias a los plátanos! "
Además de pensar en los edificios como tales, las encuestas deThibault Laconde ilustran la efectividad de ecologizar las calles. En la acera frente al Hotel Roquelaure, sede del Ministerio de Transición Ecológica, como en el propio edificio, las temperaturas no superan los 40 ° C. "¡Gracias a los plátanos! " Engaña al ingeniero en Twitter durante la encuesta.
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