Entre la historia y la imaginación
Matilde García-Mauriño presenta su tercera entrega de novelas sobre la Reconquista y un relato sobre una experiencia con visiones
P. T. 17.11.2015 | 04:33
Matilde García-Mauriño muestra las dos obras que acaban de ser publicadas. DAVID MOURIZ
La asturiana Matilde García-Mauriño ha encontrado una vocación muy prolífica. Si cuando habla de sus libros esboza una enorme sonrisa, mientras los escribe su sensación debe acerarse a la plenitud. García-Mauriño, que regentaba hasta el año pasado una administración de lotería en la calle Cienfuegos, presentará en los próximos días su dos nuevas obras: la tercera entrega de sus novelas históricas ambientadas en los albores de la Reconquista y un relato sobre una vivencia personal en la que presenció visiones tras una operación quirúrgica de calado.
Mañana estará en el Centro Asturiano de Madrid, a las 20.00 horas, para hablar de sus dos nuevos libros. El día 28 lo hará en Gijón, en "La casa del libro".
"Ocho reyes y un califa" supone la continuación de sus dos obras históricas anteriores, "La silla del Rey" y "¡Adiós, Rey Magno!". Si la primera se refiere a los primeros pasos de la Reconquista en territorio astur, la segunda tiene como protagonistas a los reyes Alfonso II el Casto y Alfonso III el Magno.
Ahora, en su nueva obra, novela las deslealtades de los descendientes de El Magno. "Sus hijos se sublevan y se reparten el reino. Las cortes asturianas pasan a León", explica García-Mauriño, que habla de "la maldición del rey Magno, porque ellos y sus hijos, de hecho, tuvieron reinados muy breves".
Durante el califato de Abderramán III hubo ocho reyes cristianos, de ahí el título de la novela, que, quizá, no sea la última. "Seguiré con la serie si Dios quiere, teniendo en cuenta que acabo de cumplir los 85 años", afirma Matilde García-Mauriño.
La otra obra que presenta, de corte bien distinto, lleva por título "A donde los ojos me llevan" y nace de una experiencia personal tras una operación de cadera. "Estuve viendo visiones trece días y apenas unos días más tarde escribí la obra", asegura García-Mauriño, que aclara que "no estaba desorientada, pero sí veía las visiones a todo color". La escritora aclara que "nunca me dieron angustia, más bien al contrario, eran cosas bonitas, relajantes y agradables". Y agrega: "Ahora novelo lo que yo vi, lo que vi está en el libro, ni más ni menos". Por eso no quiere desvelar en sus declaraciones las figuras que "se reflejaban en las paredes y el techo de la habitación del hospital".
Ambas obras de la autora asturiana han salido a la venta a la vez y ahora las presenta esperando, por un lado, entretener con la historia; y, por otro, hacer conocer una inolvidable experiencia.
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