El juez mantiene al PP en el banquillo por el borrado de los ordenadores de Bárcenas contra la petición del fiscal
El extesorero del PP tendrá finalmente que acudir a declarar en persona como testigo el próximo jueves y no podrá hacerlo por videoconferencia
Madrid
Las últimas maniobras judiciales del PP para evitar convertirse en el primer partido que se siente en el banquillo de los acusados han fracasado. El titular del Juzgado de lo Penal 31 de Madrid, Eduardo Muñoz de Baena, ha acordado este viernes que el PP mantenga su actual situación procesal y sea juzgado en la causa abierta por el borrado de los ordenadores en los que el extesorero popular Luis Bárcenas dijo que guardaba información sobre la caja b del partido. Junto al representante legal del partido, se sentarán tres de sus empleados. La Fiscalía, que durante la instrucción del sumario ya pidió el archivo de la causa, ha planteado este viernes en las cuestiones previas exculpar al PP en aplicación de la llamada doctrina Botín, según la cual que no se puede juzgar a una persona física o jurídica si no acusa la Fiscalía o el perjudicado directo, como ocurre en el este caso, en el que solo mantienen la acción penal las tres acusaciones populares personadas.
Tras escuchar a las partes, el magistrado ha acordado finalmente retrasar hasta la sentencia la resolución de esta cuestión, algo que obligará al partido a permanecer durante toda la vista en el banquillo. De nada ha servido que el abogado que defiende a la formación pidiera al juez al final de la sesión que reconsiderase su postura y que decidiera sobre la cuestión antes del próximo jueves, cuando está prevista la próxima jornada de la vista en la que tendrán que declarar, entre otros el representante del PP. El juez también ha rechazado anular el auto de apertura de juicio oral, como ha reclamado el abogado del partido en un intento final por evitar el inicio de la vista.
De este modo, el juicio por el borrado de los ordenadores de Bárcenas se celebrará finalmente con cuatro acusados en el banquillo: además del PP, estarán extesorera del partido Carmen Navarro; el que fuera responsable de los servicios jurídicos Alberto Durán y José Manuel Moreno, que ocupaba el puesto de director del sistema de informática. Los tres están acusados de daños informáticos —por haber borrado sin autorización archivos ajenos— y de encubrimiento. El partido, solo de daños informáticos. Comienza así la vista oral de un caso que ha superado en cinco años numerosos escollos: desde el archivo de la causa, hasta su posterior reapertura y una posterior reconstrucción del sumario tras el extravío de toda la documentación.
Las tres acusaciones populares personadas en la causa -Izquierda Unida, el Observatori DESC y la Asociación de Abogados Demócratas por Europa (Adade)- han mantenido la causa frente a la posición contraria de la Fiscalía de Madrid. De hecho, esta reclama la absolución de todos los acusados al considerar que durante la instrucción no quedó acreditado que el borrado y formateado de los discos duros de Bárcenas hubieran "causado daño grave” a la investigación judicial sobre la financiación ilegal del PP de los llamados papeles de Bárcenas que inició en 2013 el juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz.
El propio extesorero, que en un primer momento se personó en la causa como acusación, finalmente, se retiró. Ante de hacerlo, había asegurado que en uno de los discos duros borrados había datos sobre los manejos de la caja b del partido como listados de donantes, agendas de personas con la que se había reunido, recibos de pagos con la contabilidad paralela, hojas Excel con presupuestos de campañas electorales o detalles de sus cuentas en Suiza. Por ello, Bárcenas tendrá que declarar en la vista como testigo. Lo hará el próximo 20 de junio y en persona, después de que este viernes el juez descartase que lo hiciera por videoconferencia desde la cárcel de Soto del Real -donde está recluido tras ser condenado a 33 años de cárcel por el caso Gürtel-, tal y como había solicitado.
Ese día, además de los acusados y Bárcenas, declararán el cuñado de este y exjefe de seguridad del PP, Antonio de la Fuente, y su secretaria durante casi dos décadas, Estrella Domínguez. También comparecerá como testigo la ex secretaria general del PP María Dolores de Cospedal. Ella fue quien reveló en 2013 ante el juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz que los ordenadores que había usado Bárcenas seguían en la sede del partido de la calle Génova. Cuando Ruz los reclamó para cotejar sus archivos con los que había aportado el extesorero en una memoria USB, se descubrió que estaban vacíos. Uno no tenía disco duro. El segundo había sido formateado por el partido.
El magistrado también ha rechazado este viernes la petición de IU de que se facilite a los medios de comunicación señal institucional de televisión de la última sesión del juicio, en la que las partes exponen sus conclusiones definitivas. El juez, que ha alabado que se haya retransmitido íntegro la vista del procés celebrada recientemente en el Tribunal Supremo, considera que en este caso facilitar la imagen de este juicio supondría para los acusados "una exposición pública desproporcionada" dado el carácter "estigmatizador de la televisión". El magistrado ha asegurado que si el único acusado hubiera sido el PP su decisión en este sentido hubiera sido diferente.
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