Pedro el cachupin

Pedro Álvarez Álvarez es un albergado reciente en la alberguería de Caldones donde me encuentro. Ambos somos los úmicos que nos comunicamos por la palabra. Persona muy discreta y respetuosa, temerosa de recibir maltrato, o abuso por las asistentas auxiliadoras y otroros individuos albergados. Ayer, al fin, me dijo que quería irse para España y, a poder ser, para Gijón. Le pregunté que si estaba en Veracruz o en Puebla. llegué por Veracruz y me trasladé a Pebla donde estaba mi tio Pedro. Le pregunté si su tio regentaba una tienda de paños. Sí, me respondió rápido, me la dejó mi tio cuando murió. ¿Estás soltero? Si, tengo una sobrina allí en Gijón a la que le mandé dinero para que me cuidara. Ahora tengo ochenta ybtres años y me cuidó yo, pero necesito cariño. Pedro, yo tengo familoa aquí en Puebla, Oaxaca y Monterrey. Mañana me das la dirección de tu sobrina en Gijón y ponemos en marcha el viaje retorno. Gracias Augusto, me dijo. Me quedé sorprendido. Hasta mañana cachupin y se sonrrió dándome dos cachetazos en mi brazo derecho y sonriendo como en estos dias no le había visto.